Bueno que me enrollo demasiado, vamos a la carrera. En esta ocasión teníamos compañero nuevo de fatigas...el cuñao de mi cuñao, osea mi ¿concuñado? no sé. Por lo que habíamos hablado, estaba claro que no partíamos con la misma marca que él, aunque el insistía que al ser su primera carrera tenia mucho respeto a como afrontarla.
Recogemos el chip, calentamos a nuestra manera, es decir poco y gracias. Nos acercamos a la salida y ¡¡¡¡pum!!! a correr.
Teníamos nuestras dudas de que ritmo seguir porque a la vez que la media se corría también una de 10 km y quieras o no eso despista.
Al principio salimos a ritmo de entrenamiento, con José con ganas de darle pero quería ir con nosotros por eso de correr juntos, pero se veía que no aguantaba mucho a ese ritmo...sus piernas le pedían mas y mas.
Y como tenia que pasar sobre el km 4, hasta luego lucas...ya no le vimos hasta la meta.
Nosotros seguimos a lo nuestro, Charly empezó con un dolor de gemelo algo raro que le hizo incluso plantearse parar, pero al final se repuso. Yo por mi parte me encontraba muy bien, los 5 primeros Km el ritmo era lo suficientemente rápido como para ir cogiendo ritmo y no cansarnos. Sobre el km 8 mi cuerpo me pedía ir 10- 15 segundos mas rápido que mi compi, y me aventure a ir mas rápido. Las patas respondían y el cuerpo también.
A parti de ese momento...cada loco con su tema....Jose corriendo a tope tren, Charly a su ritmo, que es lo que le mola y lo que mejor le va...y yo en tierra de nadie.
Van pasando los km y en un par de ocasiones que el recorrido coinciden los que van y lo que vienen, veo que charly le tengo a penas un par de minutos....como no apriete, Charly me coje, pensé yo.
Siguen cayendo lo km y llegando al km 17 tengo la suerte de encontrarme con un par de tipos que no se muy bien porque se pican conmigo, y a mi que eso me pone...pues vamos a ver que pasa. En el km 18 se une un tercer corredor al pique, este si que parecía que tenia un poco mas de gasolina que el resto y decide tirar, yo le sigo y los otros dos lo intentan pero no pueden seguir el ritmo de este tipo y el mio. Quedando 500 metros para llegar ya les sacábamos un minuto a los otros dos, y como todo indicaba, al final no pude con el y me metió al menos 20 segundos en la meta. Todo esto sirvió para conseguir hacer una tiempo mas que aceptable y que el pobre Charly a pesar de darlo todo y correr los últimos km a ritmo de record, no pudiera darme pal pelo.
De Jose ni hablamos...a su rollo, tiempazo y super carrera...esta claro que esta a otro nivel.
Al final todos contentos...y lo mejor de todo es que Charly acabo sin mucho dolor de sus puñeteras lesiones y con la moral por las nubes para nuestra nueva cita Donostiarra.